Ferrolanas y compostelanas intentaron la victoria ante el histórico Kaleidos Vigo Rugby en la primera jornada de la liga femenina. El equipo local (Club Rugby Ferrol y Santiago Rugby Club) seguirán consolidando su estructura femenina

El equipo femenino del Club Rugby Ferrol debutó oficialmente el pasado domingo ante el Kaleidos Vigo Rugby, un equipo histórico en Galicia. Este era un doble debut ya que desde la creación del Club existía el anhelo de contar con una sección de rugby femenino pero a pesar de los intentos nunca había sido posible.

Este año, y fruto de la colaboración con el Santiago Rugby Club, al fin el proyecto ha cristalizado y el primer paso fue jugar en Santiago contra el equipo olívico en la primera jornada de la Liga Gallega de Rugby Femenina. El resto de conjuntos de esta categoría son el CRAT coruñés, el Rugby Lalín, el Campus Ourense Coosur, el Muralla de Lugo y el rival de esta primera jornada, el Kaleidos Vigo Rugby, que esta temporada cumple 25 años siendo el club femenino más longevo de la liga gallega.

El partido se disputó en el campo de Marrozos a las afueras de Santiago en un tiempo cambiante aunque predominó el sol a la lluvia. Las locales con camiseta totalmente roja y las viguesas con polo rayado blanco y rojo aunque perfectamente diferenciables.

Fue un partido muy intenso con dos equipos que intentaron jugar a la mano todo lo posible entre un conjunto que tiró de sus jugadoras más grandes y experimentadas, como son las viguesas mientras que las ferrolanas/santiaguesas usaron sus ganas e ilusión como armas para, desde la defensa, conseguir balones para intentar acercarse con peligro a la zona de marca viguesa.

Fue en una jugada de delantera donde las viguesas lograron anotar su primer ensayo tras un “golpe de castigo” a 5m de zona de ensayo en la que el mayor tamaño y saber hacer en juego cerrado de las viguesas hizo subir el 0-5 al marcador que, con la posterior transformación, dejó el marcador en 0-7 en el minuto 20 del primer tiempo.

En la acción siguiente y aprovechando el desconcierto existente las viguesas recuperaron la posesión de la pelota, enlazaron varias acciones de mucho mérito y en una jugada rápida ensayaron por segunda vez, no logrando transformar el ensayo, 0-12, minuto 24.

Hasta ese momento el juego había sido bastante parejo aunque con claro dominio territorial de las viguesas, a partir de aquí el juego pasó a desarrollarse en el centro del campo con dominio alterno y con las ferrolanas presionando cada vez con más intensidad para intentar llegar al descanso con opciones de anotar.

En una de esas acciones y tras avanzar 40 metros a base de una buena combinación de jugadas de delantera con rápidos movimientos de tres cuartos, llegó la gran oportunidad del primer tiempo para lograr el empate pero el exceso de ganas y el vértigo de estar tan cerca de lograr el primer ensayo de la historia pesó mucho. Las ocasiones siguieron cayendo del lado local y en otras dos ocasiones el ensayo anduvo muy cerca de caer pero no fue posible ante las imprecisiones locales y la férrea defensa viguesa. Así al descanso el marcador describía un 0-12, la victoria viguesa era justa pero las chicas de Peque y Mega merecían también haber anotado algún punto en el casillero.

La satisfacción era grande por el papel mostrado y porque quedaba claro que aún estaba el partido en el aire, sin embargo el cansancio fue haciendo mella en ambos equipos, no conviene olvidar que es el primer partido del año, y las jugadas de peligro fueron menores, manteniéndose el juego en el medio del campo con acciones esporádicas de las ferrolanas en la línea de tres cuartos que metían en muchos problemas a las visitantes. La escasez de efectivos también tuvo su papel y sólo dos jugadoras conformaban el banquillo local. Al meter varios cambios las viguesas el juego se hizo más intenso, logrando la tercera y última marca en una acción de picardía de la medio melé viguesa que aprovechó un saque rápido para anotar y luego transformar, marcador en el minuto 19 de la segunda parte, 0-19.

El resto del partido fue más tranquilo y el orden en el juego llevó a Vigo a una victoria sin más sobresaltos.

Un debut esperanzador lastrado por el poco número de efectivos en el combinado de ferrolanas y compostelanas aunque el equipo está abierto a nuevas incorporaciones ahora que aún está empezando la temporada y aunque no se tenga experiencia previa en el rugby, hay tiempo a aprender a jugar durante esta temporada. Los lunes y miércoles a las 20.00 en A Malata.

La semana que viene tocará sufrir ante el gallito de la categoría, el CRAT coruñés, un equipo que también disputa la liga de división de honor y que en lugar de tener un buen puñado de jugadoras que no han jugado antes al rugby, tienen un buen puñado de internacionales por España, esta semana ganaron a domicilio al Campus Ourense Coosur por 3 a 94 en lo que se supone otra temporada de pasearse en los campos para las coruñesas.