La formación de la escuela es en general muy práctica, con una dedicación de unas 4 horas a la semana, repartidas en dos días (miércoles de 17h a 18h45 y sábados de 11h a 13h15). El objetivo es divertirse a la vez que se adquieren nociones básicas de rugby y habilidades, tanto individuales como colectivas. Poco a poco se aprende lo necesario para empezar a jugar, y a partir de ese momento la diversión aumenta de forma exponencial.
Esta escuela centra su docencia en los valores del rugby, como compañerismo, solidaridad, sacrificio, seguridad, respeto, disciplina, compromiso, etc. Y todos aprendemos muchas cosas que después nos sirven para la vida.